CMN aprueba declarar Monumento Nacional a los Corrales de Chalaco en Putaendo
La solicitud de protección emanó de un amplio de un conjunto de organizaciones sociales encabezadas por el municipio de Putaendo, las que reconocieron en estas obras coloniales un testimonio de la arquitectura patrimonial rural, así como un registro de los modos de habitar las zonas cordilleranas de la zona central de Chile.
“Se trata de los corrales mejor conservados de la zona central, por la cual constituyen obras de un excepcional valor patrimonial, representativo de arquitectura ganadera del siglo XVIII y de las tradiciones criollas, que aún están vigentes”, dijo Ángel Cabeza, director nacional de Bibliotecas Archivos y Museos (Dibam) y vicepresidente del Consejo de Monumentos Nacionales (CMN).
Con un origen que se remonta a la época precolombina, la zona en que se emplazan los corrales ha sido identificada como parte del ramal trasandino incaico que, posteriormente en el periodo colonial, en el siglo XVII ya se caracterizaba por ser escenario de una amplia red comercial de carácter ganadero.
Los corrales fueron construidos con piedras ígneas, tanto en estado natural como modificadas para encajar entre ellas. Poseen un aparejo rústico y sedimentario, cuyos muros son dobles con rellenos. La totalidad del conjunto consta de 36 muros, divididos en tres categorías, cuyo largo depende del sector que compongan. El volumen total estimado es de 3.423 m3 de piedras.En la actualidad los corrales son utilizados para las veranadas, en las cuales se junta el ganado, se categoriza y se distribuye con sus propietarios.
El Consejo de Monumentos reconoció en los corrales edificaciones rusticas, representativas de parte de la arquitectura patrimonial rural colonial, y un testimonio privilegiado de los modos de habitar las zonas cordilleranas de la zona central de Chile que han logrado perdurar tres siglos. Los corrales de Chalaco representan técnicas constructivas que fueron adquiridas desde tiempos prehispánicos, con modificaciones posteriores acordes para adaptar a la época actual sin generar un impacto en la estructura. El uso de la piedra seca y la distribución de estas pircas permite tener un acercamiento a la lógica de construcción de siglo XVIII.
El lugar, además, guarda vestigios de la forma de habitar de diferentes culturas, lo cual se comprobó mediante las excavaciones arqueológicas que revelaron testimonios materiales los periodos alfarero temprano e intermedio tardío.
“Los corrales del Chalaco son considerados por los habitantes de la zona como un bien cultural relevante y un potencial recurso para el desarrollo local, puesto que representan parte de su arquitectura de sus antepasado y forma parte de su identidad actual”, dijo por su parte Ana Paz Cárdenas, Secretaria Técnica del Consejo de Monumentos Nacionales.
La solicitud de declaratoria como Monumento Nacional será remitida al Ministerio de Educación para la dictación del decreto respectivo.