Entre las diversas instituciones que forman parte del Servicio Nacional del Patrimonio Cultural se encuentra el Centro Nacional de Conservación y Restauración, especializado y reconocido tanto en el país como en el extranjero por promover la conservación y la investigación del patrimonio cultural.

En las dependencias del CNCR como se le conoce y con el apoyo del equipo experto, se diseñó y construyó en 2013, por ejemplo, el embalaje en el que se trasladó la momia Chinchorro que fue parte de la exhibición temporal "Great Journey, el viaje de la humanidad" que se realizó ese mismo año en Museo Nacional de la Naturaleza y Ciencia en Tokio, Japón.

En este mismo lugar se restauró también la figura religiosa de la Virgen del Carmen que en 2008, mientras se exponía como era habitual en la Parroquia del Sagrario ubicada al costado de la Catedral de Santiago-, sufrió un ataque incendiario que provocó daños de consideración en la imagen. La Cofradía solicitó el apoyo de este centro especializado para evaluar la factibilidad de recuperar la figura y junto a un equipo interdisciplinario, completamentar en sus aspectos materiales y simbólicos.

Y es que, entre sus variadas funciones, el CNCR presta asesoría a instituciones y organizaciones nacionales relacionadas con el patrimonio cultural en materias de intervención, investigación y gestión. Fue así que a solicitud de la Biblioteca Nacional en 2012 ingresaron al Laboratorio de Pintura del Centro las obras Los funerales de César (1898) y Catón en las fiestas florales de Roma (1900), realizadas por el pintor italiano Prospero Piatti (1840 - 1902). Estos óleos sobre tela son parte de la colección del Museo Nacional de Bellas Artes pero fueron entregados en préstamo a la Biblioteca Nacional en 1978, requiriendo un diagnóstico y posterior proceso de estudio e intervención por parte del CNCR.

Gran cantidad de suciedad superficial, deterioros menores y pérdida del plano fueron parte del diagnóstico que propuso a su vez la intervención y puesta en valor de ambas piezas. El trabajo de restauración se enfocó en primera instancia en un estudio estético- histórico para contextualizar las obras y reconocer sus características, pero también en las acciones de conservación y restauración que permitieron recuperar el colorido, la perspectiva y los detalles de estos óleos de gran formato.

Todo el proceso fue documentado paso a paso generando un interesante material relacionado alitinerario de las obras de Prospero Piatti, las técnicas de restauración que se aplicaron en ambos casos y el análisis estético y morfológico de Los funerales de César y Catón en las fiestas florales de Roma, donde a través de planos y análisis iconográfico se puede entender desde otra perspectiva estas piezas, además de visualizar los cambios en ellas.

Los Piatti regresaron a la Biblioteca Nacional a mediados de 2013, periodo desde el cual son exhibidos en el Salón Camilo Henríquez.

No te pierdas esta oportunidad de ahondar en parte del quehacer de este centro especializado.

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