La firma del convenio fue suscrita en el despacho de la directora de Bibliotecas, Archivos y Museos, Magdalena Krebs, y contó con la asistencia de autoridades de la Dibam, como Gonzalo Oyarzún, subdirector (s) de Bibliotecas Públicas, junto a representantes de Coopeuch, encabezados por la gerente general de esta entidad, Siria Jeldes Chang y la directora ejecutiva, Carolina Sorensen Mc Kendrick.



El apoyo consiste en el "apadrinamiento" a tres bibliotecas públicas por un período máximo de tres años, en los cuales se entrega un fondo anual de 4 millones de pesos a cada biblioteca, destinado a mejorar las condiciones materiales y de infraestructura en estos centros de lectura y la adquisición de materiales y textos.



Las bibliotecas favorecidas han sido sugeridas por la Subdirección de Bibliotecas Públicas considerando sus carencias y necesidades más inmediatas, junto a la buena gestión que realizan a pesar de sus problemas. En otras palabras, es un respaldo a la eficiencia. "Se suman virtuosismos en este tipo de acciones", dijo hoy Magdalena Krebs.



En la primera etapa del convenio fueron beneficiadas la Biblioteca Pública N° 305 de Alto Hospicio, Biblioteca Pública Municipal N° 256 de La Florida (Talca) y Biblioteca Pública N° 201 de Río Bueno, (Región de Los Lagos).



En esta nueva etapa, los centros de lectura beneficiados con este acuerdo son la Biblioteca Pública N° 318 "Benigno ávalos Ansieta", de la comuna de Alto del Carmen (Región de Atacama); Biblioteca Pública N° 133 de la localidad de Placilla (Peñuelas, Región de Valparaíso) y Biblioteca Pública N°192 de la comuna de Coihueco (Región del Bío Bío).



Instancias conjuntas


Coopeuch, además de ofrecer productos y servicios financieros, impulsa una serie de iniciativas educativas y sociales, reflejando su constante interés por promover la responsabilidad social. "Hay que explorar otras instancias conjuntas, porque la idea es trascender a la comunidad. Hemos visto cambios sustanciales en las bibliotecas que hemos ayudado", expresó Carolina Sorensen, directora ejecutiva de Fundación Coopeuch.



Magdalena Krebs, por su parte, dijo: "Uno de los valores de este proyecto es la continuidad de una iniciativa que ha resultado ser exitosa. Esperamos poder seguir trabajando con Coopeuch para conseguir que esto se multiplique y se lleve a otras bibliotecas. Aquí se unen muchas instancias: la Dibam, las municipalidades beneficiadas y Coopeuch. Cada uno, de acuerdo a sus especialidades, hace un aporte para conseguir un beneficio mayor que es que la comunidad a la que esta biblioteca sirve, esté mejor atendida, más cómoda y con un lugar más grato donde poder usarla".



Y finalizó señalando: "La empresa privada es una gran colaboradora nuestra y todas las instancias que nosotros podamos utilizar para trabajar en conjunto son bienvenidas y beneficiosas para todos. La empresa privada no sólo contribuye con dinero, sino que también, como en este caso, con una idea, con su experiencia y con la facilidad que ellos tienen para llevarla adelante dándola a conocer a sus asociados, a sus clientes, haciendo posible que las bibliotecas públicas se instalen de mejor manera en la sociedad".