Amor hecho piedra, el legado de Lily Garafulic (1914-2012)
En la ciudad de Antofagasta, en el Norte Grande de nuestro país, y en el seno de una familia de origen croata, nació un 14 de mayo de 1914 Lily Garafulic Yancovic, quien con el pasar de los años se transformó en una de las escultoras nacionales más reconocidas y una de las mujeres más influyentes en la escena artística chilena.
Una fecha que cobra especial significado para el Servicio Nacional del Patrimonio Cultural con quien su familia ha desarrollado un trabajo conjunto desde hace unos años y donde Lily Garafulic es especialmente recordada por ser la primera mujer en asumir la dirección del Museo Nacional de Bellas Artes, cargo que ejerció desde 1973 hasta 1977 y bajo el cual impulsó importantes reformas como la creación del Laboratorio de Restauración y Conservación de Obras de Arte del Museo, iniciativa que luego se amplificó y dio paso a la creación del Centro Nacional de Conservación y Restauración, CNCR, de la entonces Dirección de Archivos, Bibliotecas y Museos, Dibam, hoy Servicio Nacional del Patrimonio Cultural.
"Uno de nuestros objetivos esenciales, y más aun en este contexto de emergencia sanitaria, es acercar a toda la ciudadanía al patrimonio cultural desde cualquier ubicación física mediante la tecnología. En ese sentido, y dándole valor al ofrecimiento que generosamente nos hizo la familia de Lily Garafulic, invitamos a todos y todas a sumergirse justo en el día de su natalicio en la obra de esta gran artista nacional, que con gran talento y pasión hizo de la piedra su material de trabajo y expresión", afirmó Carlos Maillet, director del Servicio Nacional del Patrimonio Cultural.
"Como familia estamos felices de que al cumplirse los 106 años del natalicio de Lily Garafulic, poder hacer accesible el documental "Lily Garafulic--en sus propias palabras", para que personas de todos los rincones de Chile puedan tener la oportunidad de conocer un poco más a esta gran mujer y artista.También les invitamos a visitar en forma virtual la 'Sala Lily Garafulic' en la Universidad de Talca que por motivos de la pandemia mundial, pensamos que esta es una excelente forma de acercar al público a Lily Garafulic y conocerla a ella y a su obra", complementó Gloria Garafulich-Gabrois, familiar de la artista.
"Amor hecho piedra" es el título con el que las familias Garafulich-Grabois y Garafulic Litvak recuerdan y celebran los 106 años de su natalicio junto a la Dirección de Extensión Cultural de la Universidad de Talca, fecha en que se convoca a ver el documental Lily Garafulic--en sus propias palabras.
Este material audiovisual disponible a través de la web de la artista retrata una conversación con su sobrina en 2009 que incluye material y fotografías del archivo privado de las familias Garafulich-Grabois y Garafulic Litvak y fue producido y dirigido por Gloria Garafulich-Grabois & Alexander P. Grabois. Cuenta también con una versión subtitulada en inglés compartida en la misma web.
Este 14 de mayo también estará disponible desde su web el documental Una visita a la Sala Lily Garafulic en el Campus Talca de la Universidad de Talca, establecimiento educacional que en 2013 recibió 65 obras escultóricas de la colección particular de la artista que luego pasaron a formar parte de la Colección Patrimonial Artística de dicha institución y que se podrá recorrer virtualmente con motivo de este natalicio. El documental es también una producción de la familia.
La vida y obra de Lily Garafulic
Nacida como la menor de 9 hermanos y educada desde pequeña en Santiago, su íntima conexión con el arte se inició a temprana edad tras demostrar un gran talento como dibujante y recibir también la influencia del ambiente artístico en que su hermano Andrés se desenvolvió gracias a la arquitectura.
Esta conexión la llevó a ingresar a la Escuela de Bellas Artes de la Universidad de Chile el año 1934 donde estudió dibujo en el Taller de Hernán Gazmuri y fue alumna y luego ayudante del curso de escultura del maestro Lorenzo Domínguez, miembro de la Generación de los 40.
En una estadía en Paris, Francia conoció en 1938 al escultor rumano Constantin Brancusi de quien admiraba la simplicidad y la fuerza expresiva de los materiales que utilizaba en su obra para luego continuar su formación en la escultura y las técnicas de mosaico y vitreaux. Luego de ganar la Beca Guggenheim, en 1944 se traslada a Nueva York para continuar su formación e ingresa al New School of Social Research en Nueva York donde fue alumna del escultor José de Creeft y en forma paralela, estudió grabado en el Atelier 17 de William Hayter.
A partir de entonces desarrolló una carrera que le permitió desarrollar una labor docente y seguir al mismo tiempo conociendo a otros artistas que la influyeron personal y creativamente. Por estos años inició su labor docente en la Facultad de Artes de la Universidad de Chile donde en 1947 fue profesora suplente de la cátedra de Escultura, convirtiéndose en formadora y referente fundamental de posteriores generaciones de escultores y ya en 1951 asumió como profesora titular de la cátedra de Escultura en la Universidad de Chile.
Reconocida tanto en territorio nacional como extranjero, la artista participó en múltiples instancias de la escena artística internacional como representante de Chile y siempre estuvo complementando su formación mediante viajes de estudios a diferentes destinos como Perú, Bolivia y Rapa Nui.
Considerada como una de las tres escultoras más importantes del país, junto a Rebeca Matte y Marta Colvin, Lily Garafulic fue distinguida con varios reconocimientos nacionales e internacionales como el Premio del Círculo de Críticos de Arte en 1985, el Premio Rebeca Matte otorgado por el Ministerio de Educación en 1992, y el Premio Nacional de Arte otorgado por el gobierno chileno en 1995, además de ser nombrada Profesor Emérito de la Universidad de Chile en 1997. En el 2018, el Gobierno de la Republica de Croacia le otorga póstumamente la condecoración Red Danice Hrvatske.
Lily Garafulic falleció en Santiago de Chile el 15 de marzo de 2012 a los 98 años de edad y posterior a su deceso y respetando la voluntad de la artista, su familia donó a la Biblioteca del Museo Nacional de Bellas Artes parte de su biblioteca.