Aprueban recursos para recuperar emblemas del patrimonio de Valparaíso
Este jueves 15 de octubre el Consejo Regional (Core) de Valparaíso anunció la aprobación de más de 12 mil millones de pesos para la región, cifra que permitirá implementar dos proyectos asociados a inmuebles íconos del patrimonio local: a través de la compra del emblemático Palacio Subercaseaux y diseño de lo que será el futuro Archivo Regional de Valparaíso, y el diseño de la "Restauración de la Iglesia, Convento y Museo de San Francisco de Curimón" en San Felipe.
"Esta noticia es un avance fundamental en la implementación de nuestro ministerio en regiones. Especialmente en aquella donde tenemos la sede principal. La recuperación del ex Palacio Subercaseaux permitirá crear el archivo regional, institución clave para la memoria e identidad local, y revitalizar un sector ubicado en el corazón del Sitio de Patrimonio Mundial", destaca la Ministra de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, Consuelo Valdés.
Levantado en el año 1895, el inmueble hoy cuenta solo con su estructura de fachadas, luego de quedar en ruinas debido a la explosión e incendio de calle Serrano ocurrida el 3 de febrero de 2007. La iniciativa es un paso clave en la instalación del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio y se encuentra bajo el alero del Plan Nacional de Infraestructura impulsado por el Ministerio junto a otros servicios públicos, cuyo propósito es avanzar en el desarrollo de una cartera de proyectos de infraestructura patrimonial a lo largo del territorio.
Además, el proyecto se inserta en uno de los ejes principales de la Estrategia de Desarrollo 2020: "Fortalecimiento de la identidad regional y la diversidad cultural". El desafío será contar, a partir de 2023, con servicios de archivo en cada una de las regiones del país.
La directora del Archivo Nacional, Emma de Ramon dijo: "esta noticia nos llena de alegría", porque se ha dado el primer paso para iniciar la fundación del Archivo Regional de Valparaíso. Una región rica en documentación patrimonial que por fin podrá guardar en su seno los testimonios escritos de su memoria".
En total, se invertirán $1.011.711 millones. Parte de estos recursos serán destinados a la adquisición del terreno ($637.129 millones). Posteriormente se realizará un diseño cuya superficie proyectada será de 5.375 m2, espacio que se dividirá entre el Archivo Regional, un Depósito legal externo para el Museo de Historia Natural de Valparaíso, áreas públicas, y oficinas de la Dirección Regional del Servicio Nacional del Patrimonio Cultural.
Un aspecto importante de la nueva estructura es que se encuentra fuera de zona de inundación del plan Valparaíso y adicionalmente el Servicio Nacional del Patrimonio Cultural, perteneciente al Ministerio de las Culturas, ha dispuesto que los recintos que albergarán colecciones y archivos se ubiquen desde el nivel 2 hacia arriba del inmueble.
El proyecto se suma a otras iniciativas como la recuperación de fachadas a través del proyecto "Emerge Valparaíso" que impulsa actualmente el Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio para recuperar la identidad del barrio puerto y remozamiento de los inmuebles.
San Francisco de Curimón
En el caso de la iglesia, convento y Museo de San Francisco de Curimón, Monumento Histórico desde 1971, se considera la ejecución de un diseño cuyo costo asciende a $473.500 millones, y contempla la recuperación del museo colonial perteneciente a la orden Franciscana, asentada allí desde finales del siglo XVII. Las obras serán licitadas en dos etapas: arquitectura y especialidades; y luego restauración y conservación de bienes muebles.
El templo de San Francisco de Curimón es un importante protagonista de la historia de Chile. Entre sus notable anecdotario figuran la firma del acta de fundación de ciudad de San Felipe del Real, el 4 de agosto de 1740; y los claustros del convento fueron el refugio ideal para los soldados del Ejército Libertador al mando de José de San Martín, horas antes de enfrentar a las tropas realistas en la batalla de Chacabuco en 1817.
El proyecto se abre a la comunidad, a través del programa de trabajo, el que se desarrollará en conjunto con las comunidades locales, como por ejemplo la Escuela Agrícola, quienes podrán usar el espacio para comerciar sus productos y así poner en valor el patrimonio agrícola, histórico y religioso de la zona.