CHILE RECUPERA DOCUMENTOS HISTÓRICOS SOBRE EL TREN TRASANDINO LOS ANDES-MENDOZA
Libretas de apuntes, planos, fotografías y dibujos relacionados con el proyecto ferroviario trasandino Los Andes-Mendoza forman parte del archivo de Alex R. Gulliver, ingeniero británico que llegó a Chile a principios del Siglo XX. Gulliver, al igual que los hermanos Juan y Mateo Clark, tuvo un rol clave en el desarrollo de esta obra vial de gran envergadura y complejidad técnica.
Durante años, los documentos permanecieron en el garaje de un ciudadano australiano, quien luego de revisarlos y catalogarlos, los donó al Consulado General de Chile en Sydney. Posteriormente, la Dirección de Asuntos Culturales del ministerio de Relaciones Exteriores (Dirac) decidió traspasarlos a Dibam.
A la ceremonia oficial de entrega, realizada el 31 de agosto en el Salón Ricardo Donoso del Archivo Nacional, asistieron Fernando Schmidt, subsecretario de Relaciones Exteriores; Osvaldo Villaseca, conservador del Archivo Nacional; y Magdalena Krebs, directora de Dibam.
"Estos magníficos documentos vuelven a Chile gracias a las gestiones de nuestra cancillería y a la generosidad de un descendiente del ingeniero Gulliver, quien comprendió la trascendencia que tiene para un país la recuperación de su patrimonio. Nuestra tarea ahora es conservarlos y difundirlos", señaló Krebs.
Reflexiones
El legado de Gulliver contempla trabajos realizados en Chile y en Colombia, e incluye folletos de modelos de equipos ferroviarios de la época. A la vez, hace referencia a un proyecto realizado por Mateo Clark sobre el puerto de Sevilla, en España.
Mediante las anotaciones es posible conocer aspectos técnicos y logísticos de la construcción del tren trasandino Los Andes-Mendoza y de los ramales en la zona norte, destinados a labores salitreras.
"La donación de Alex R. Gulliver viene a complementar los documentos existentes en los fondos del ministerio del Interior y del ministerio de Obras Públicas existentes en nuestro Archivo Nacional, que en conjunto dan cuenta del pasado reciente y que nos permiten reflexionar sobre problemáticas de hoy", dijo Osvaldo Villaseca, conservador del Archivo Nacional.
Un fragmento de la historia
Desde su inauguración, en 1910, el tren Los Andes-Mendoza promovió el desarrollo comercial y la integración de Chile y Argentina. Durante décadas transportó pasajeros y cargas por pendientes y túneles cordilleranos. En 1984 dejó de prestar servicios.
La misma ciudad de Los Andes, como dijo el alcalde de la comuna Mauricio Navarro, creció al alero del ferrocarril. Hoy, un fragmento de esa historia regresa al país gracias a la iniciativa que promueve DIRAC para recuperar patrimonio chileno en distintos países.
"Hemos procurado que todos los funcionarios del servicio exterior se sensibilicen con este tema y contribuyan cada vez más a identificar oportunidades desde el exterior para una integral preservación y puesta en valor de nuestra memoria histórica", afirmó Fernando Schmidt, subsecretario de Relaciones Exteriores.