Con la curatoría de Gloria Cortés Aliaga y de Eva Cancino Fuentes nace la nueva exhibición del Museo Nacional de Bellas Artes, “Luchas por el arte. Mapa de relaciones y disputas por la hegemonía del arte (1843-1933)”. La muestra, cuyo nombre actualiza desde el presente el título del libro de Alberto Mackenna publicado el año 1915, resulta desafiante, en varios sentidos. Lo primero es que el proceso curatorial triangula los espacios de institucionalidad, enseñanza y escritura, a modo de cartografía conceptual que permitirá comenzar a pensar el nuevo guión permanente del Museo. Segundo, como correlato a la exposición, se está, generando un repositorio digital que permitirá acceso libre a documentos y archivos de la historia del arte en Chile, así como acercarse a nodos conceptuales y relaciones que han marcado su relato.  Tercero, y esto es relevante para nuestro programa, se trata de una muestra que incorpora, quizás por vez primera, los avances concretos de una política de adquisiciones permeada por el enfoque de género y la interseccionalidad. 

La dupla de investigadoras detrás de la muestra tiene un camino importante de proyectos y acciones curatoriales, donde el enfoque de género y los feminismos han sido fuerzas movilizadoras de un quehacer museal vinculado al presente,  que busca diálogo, propuesta y diversidad.  Sobre cómo se gesta este proceso, que tuvo su hito inaugural el pasado 20 de diciembre, comparten que se trata de un proyecto que tiene varios años y que, de alguna manera, resumen investigaciones y reflexiones que ambas han venido desarrollando y que, hoy, confluyen en este mapa conceptual. 

“Quisimos problematizar, a partir del emblemático libro de Alberto Mackenna –Luchas por el arte (1915)- las diversas escenas artísticas que se gestan y construyen la historia del arte en Chile, y abrirla a constelaciones de relaciones que, a su vez, determinan esas escenas. Aparecen entonces las disputas por los espacios, por la hegemonía de la academia y la enseñanza, la cuestión de la clase como determinante, la circulación como estrategia, las denuncias y las marginaciones, entre otras cuestiones. Entonces lo que vemos es un entramado de obras, citas y archivos que son los que permiten visualizar estos conflictos y asociaciones”, comentan, sobre esta exposición que está pensada para ir complementándose en el tiempo,  a partir de nuevas preguntas y problemas que surjan de la mirada colectiva de distintas comunidades frente a los tres ejes que la articulan este mapa conceptual. 

Sin duda, institucionalidad, enseñanza y escritura, son espacios que dialogan con el presente, “especialmente en cómo se construyen escenas y cómo aparecen entre medio de los espacios de poder, esas voces disidentes que hoy interpelan sobre temas y cuestiones de relevancia social. Y ahí aparece también el museo. Vemos como se ha proyectado la precarización, los problemas de espacio, recursos, personal, lo que entra a su colección, e incluso el rol social del museo y el arte que queda muy explícito en demandas como las del Grupo de Estudiantes de la Universidad de Chile en 1921,  la Asociación de Artistas de Chile de 1930 o las declaraciones de Perotti en 1935”, explican, develando parte de los documentos que son parte de la muestra y que integran el repositorio digital alojado en la web del museo.

En torno al enfoque de género, variable siempre presente en sus procesos curatoriales, el equipo de investigadoras abre la posibilidad de pensar su relato expositivo desde la ausencia y desde otros espacios de disputa. “Pero no solo en torno a la poca representación de las mujeres en la colección, sino principalmente porque las artistas no están disputando los espacios de poder. No son ciudadanas, por ejemplo, lo que impide su participación en los debates públicos, pero, también, porque sus luchas están centradas en ingresar a los sistemas de representación del estado en la igualdad de derechos. Lo que vemos en estas mujeres, entonces, es el reclamo por ingresar en igualdad de condiciones al sistema de formación artística o bien, disputas de clase al interior de las organizaciones de mujeres pero centradas en los sistemas de colaboración y ayuda para la circulación de obras de mujeres”, comentan, destacando, en esa línea, la incorporación de algunas obras de artistas del periodo, reflejando los avances de una política de adquisiciones que considera criterios de género e interseccionalidad para ampliar la colección del museo.

“Luchas por el arte. Mapa de relaciones y disputas por la hegemonía del arte (1843-1933)” estará abierta de martes a domingo, de 10:00 a 17:30 horas, por todo el 2023. 

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