Patrimonio a un clic: el legado urbano del intendente más prolífico de Santiago
En el número 94 de la Avenida Vicuña Mackenna, en una de las vías más concurridas de la capital, se encuentra el Museo Benjamín Vicuña Mackenna que forma parte del Servicio Nacional del Patrimonio Cultural. Está dedicado a difundir la vida y obra de Benjamín Vicuña Mackenna (1831-1886), quien fuera uno de los personajes más destacados de la historia nacional en sus roles de agitador, historiador, escritor, político y con especial énfasis en su legado urbano en Santiago, con el que contribuyó al conocimiento del desarrollo, planificación y problemáticas de la capital, reflexionando estas temáticas en conjunto con sus habitantes.
El portal patrimoniovirtual.gob.cl ofrece realizar un recorrido en 3D por sus instalaciones y por su historia a través de imágenes y objetos característicos de este espacio. Iniciado el recorrido virtual en el antejardín del Museo Benjamín Vicuña Mackenna, la pileta traída a mediados del siglo XX desde el cerro Santa Lucía es la protagonista y desde ella es posible observar los dos edificios que conforman el museo.
El primero de éstos, una pequeña edificación de dos pisos ubicada al lado izquierdo, es el único lugar original que permanece de la casa quinta y espacio personal de Benjamín Vicuña Mackenna que fue declarado Monumento Histórico en 1992. A la derecha, se encuentra el edificio construido entre 1947 y 1957 especialmente para la inauguración del museo con el objetivo de resguardar los objetos personales del legado del intendente y su familia.
El recorrido comienza en el Monumento Histórico, inmueble que fue utilizado por Vicuña Mackenna como su escritorio, biblioteca y museo personal. En este espacio, el político, escritor, periodista, coleccionista, historiador, sostuvo innumerables reuniones en su época, redactó gran parte de sus libros y planificó sus acciones para la ciudad de Santiago en su periodo de intendente.
Ingresar al Monumento Histórico es una invitación a viajar por el pasado, a la historia de la aristocracia chilena del siglo XIX. En el primer piso, podemos apreciar la sala dedicada a escritorio de trabajo, así como también múltiples objetos que fueron parte de su colección personal. Destaca su colección de armas, tinteros, plumas; y por supuesto el mueble escritorio de dos cuerpos y cubierta rojo oscuro, con los objetos que utilizaba de forma cotidiana como el tintero, abre cartas, cuño, reloj de bolsillo y polvero, gracias al cual podemos imaginar a Benjamín Vicuña Mackenna ideando proyectos para cumplir su gran sueño de convertir a Santiago en el París de América.
En el segundo piso del Monumento Histórico, ambientando como un espacio familiar, destaca el muro de retratos donde podemos encontrar a su esposa, Victoria Subercaseaux, y sus hijos, así como a sus padres y abuelos, representados con la impronta de los retratos del siglo XIX. Podemos encontrar también objetos que pertenecieron al intendente y su familia, por ejemplo la vajilla que utilizaban en la Casa Quinta.
El recorrido continúa en el segundo edificio, construido gracias al ímpetu de Eugenio Orrego Vicuña, nieto de Benjamín Vicuña Mackenna y principal impulsor y fundador del Museo. Inaugurado en 1957, este edificio ha acogido tres exposiciones permanentes a lo largo de su historia, siendo la última inaugurada en octubre de 2019.
En el ingreso, nos encontramos con el plano de Santiago y en la escalera con diferentes temáticas que Vicuña Mackenna insertó en la discusión sobre la capital y que hasta hoy continúan vigentes, como por ejemplo, áreas verdes, agua potable, planificación territorial, entre otros. Subiendo hacia el segundo piso, nos encontramos con la Vista Panorámica de Santiago, litografía realizada en 1855 por Thomas Sinclair, y que retrata la capital que inspiró y enamoró a Vicuña Mackenna.
Este es el inicio de la exhibición permanente compuesta por dos salas, la primera dedicada al ciudadano Benjamín Vicuña Mackenna, donde es posible recorrer la vida del político desde el joven revolucionario hasta sus últimos años como un reconocido político e historiador, pasando por sus múltiples facetas, aristas y aportes a la historia y sociedad del siglo XIX.
Podemos encontrar también objetos que pertenecieron a Vicuña Mackenna, por ejemplo la banda azul y rojo que utilizó durante su periodo como intendente de Santiago entre 1872 y 1875, o la plana inaugural con que dio por aperturados varios edificios públicos durante su mandato, tales como la Iglesia del Sacramento y el Hospital El Salvador.
De especial interés es la torre de libros escritos por él entre los 16 y los 55 años correspondientes a 1.508 artículos en periódicos y 192 libros que suman cuatro metros lineales de libros. Algunos de esos títulos se pueden conocer en la colección digital Vicuña Mackenna: cronista y actor de la Guerra del Pacífico, impulsada por la Subdirección de Investigación a través de su proyecto Bajo la Lupa así como otros temas inspirados en este actor de la historia nacional.
Imperdible en esta sala es el juicio de sus contemporáneos, un espacio enfocado en comentarios realizado en torno a su figura como protagonista de su época y hombre público por excelencia, en los que fue objeto de admiración y de sátira. La prensa conservadora se burlaba de sus afanes políticos y literarios, mientras que intelectuales de renombre como Rubén Darío o José Victorino Lastarria , alababan su energía, creatividad y compromiso republicano.
La segunda sala, está dedicada al legado urbano del intendente, reconocido como el más prolífico en la historia. Su interés por las áreas verdes, el acceso al agua potable, el mejoramiento de obras públicas, el acceso a la educación, y el valor sanitario que le entregaba a las construcciones "bellas" para la población, lo convierten en un adelantado a su época y visionario cuyas ideas aún en la actualidad permanecen vigentes.
En el recorrido virtual, también es posible conocer la Sala Taller donde se realizan múltiples talleres para estudiantes, vinculando la museografía con el contenido del currículo escolar. Así también, en el primer piso, se encuentra la biblioteca pública del museo, formada por más de 10.000 volúmenes acerca de historia, ciencias sociales y patrimonio.
Inaugurada en agosto de 1974, cuenta con obras completas de Vicuña Mackenna y de contemporáneos como José Francisco Bilbao, José Victorino Lastarria, Miguel Luis Amunátegui, Diego Barros Arana, Domingo Faustino Sarmiento y Santiago Arcos, Alphonse de Lamartine, Johann Wolfgang von Goethe, entre otros, y cada año van sumando nuevas publicaciones que enriquecen su patrimonio bibliográfico.