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PRENSA Y PATRIMONIO

En Sala América

PRENSA Y PATRIMONIO

Publicado el 07/08/2006
Política, periodismo y televisión fueron algunos de los temas que congregaron a connotados profesionales en la Biblioteca Nacional.

Dos mesas, integradas por conocidos académicos y periodistas, dieron espacio al debate y la reflexión en el encuentro titulado [!b:Diálogos sobre prensa y patrimonio], en la [!N:www.bndechile.cl Biblioteca Nacional], el martes 8 de agosto. La primera conversación, llamada [!b:Prensa y política], se realizó en el marco de la donación del archivo de Luis Hernández Parker, Premio Nacional de Periodismo 1954, a la Biblioteca Nacional. Participaron Marcia Scantlebury, Enrique Ramírez Capello, Patricio Navia y Consuelo Saavedra. Hernández Parker nació el 25 de marzo de 1911 en Antofagasta y murió el 1 de mayo de 1975. Inició su trabajó de periodista en el diario de izquierda [!c:Frente Popular] en 1934; después, en 1941, se incorporó a la revista [!c:Ercilla] donde publicó crónicas y reportajes sobre política. Además, trabajó en las radios [!c:Americana], [!c:Agricultura], [!c:Cooperativa], [!c:Portales] y [!c:Minería]. Su legado, depositado en la Biblioteca Nacional, consta de 17 sobres con libretos de radio escritos entre 1947 y 1974. [!b:Hablemos de TV] Con motivo de la presentación del número 40 de la [!N:www.patrimoniocultural.cl Revista Patrimonio Cultural], la segunda mesa, [!b:Televisión y patrimonio], tuvo como invitados a Eduardo Santa Cruz, Claudio Rolle, Rodrigo Quiroz y Alberto Gesswein. En esta edición -titulada [!b:Caja feliz]-, los artículos y ensayos indagan sobre la cultura e influencia (o ausencia) de la televisión en la construcción de patrimonio e identidad. En Chile existen 2,6 televisores por familia, y según la Encuesta Nacional sobre Equipamiento y Consumo Televisivo 2005, el 59 por ciento de la población manifiesta estar insatisfecha con la programación de la televisión abierta. Sin embargo, a estas alturas, resulta difícil imaginar lo que sería nuestra vida sin la presencia de este invento que, además de llenar las horas de ocio con sus radiaciones catódicas, ha ido conformando con sus imágenes parte de nuestra memoria.