Segundo esqueleto de ballena Sei es rescatado en Puerto Williams
Este lunes 6 de julio se realizó en la costa de Puerto Williams el rescate de los huesos de la ballena Sei juvenil que en marzo pasado había quedado a la deriva luego del ataque de orcas que sufrió este ejemplar junto a su madre.
Los restos del cetáceo mayor fueron rescatados en esa misma fecha pero faltaba recuperar los de su ballenato, acción que fue liderada por el director del Museo Antropológico Martin Gusinde, Alberto Serrano, en coordinación con la Armada de Chile y el Servicio Nacional de Pesca Regional, cuyo personal prestó un fundamental apoyo en esta labor.
Este evento es la segunda parte del proyecto a largo plazo de Rescate y Puesta en Valor de las osamentas de los mamíferos del Cabo de Hornos, gracias a una iniciativa del Servicio del Patrimonio Cultural de Magallanes en conjunto con otros actores como el Museo de Historia Natural de Río Seco, la Universidad de Magallanes y la comunidad Yaghan de Bahía Mejillones.
"Para este rescate fue necesaria la participación de más de una decena de personas que apoyaron con una embarcación, labores de buceo y recorrido por el sector ubicado al este de la ciudad de Puerto Williams. Se trata de un sector barrancoso y cercano a la desembocadura del río Guanaco, lo que complicó el retiro de los huesos, el que finalmente fue posible gracias al apoyo de los equipos de la Armada y Sernapesca de Cabo de Hornos", comentó Pablo Quercia, director regional del Servicio Nacional del Patrimonio Cultural de Magallanes y de la Antártica Chilena.
"El material rescatado será tratado y preparado por especialistas para ser exhibido a la comunidad en los próximos meses, junto con los restos de la ballena Sei adulta recuperada en marzo", explica Alberto Serrano, director del Museo Antropológico Martin Gusinde.
La ballena Sei o Balaenoptera borealis, se distribuye a lo largo de todo el territorio chileno y en verano se avista en las costas de la zona del canal Beagle y alrededores debido a la concentración de alimento. Es una especie considerada en peligro y protegida por la legislación nacional e internacional y convenios internacionales.